El comedor de Arkiso Akako, que es la zona más amplia del kebele, fue el lugar donde celebramos el éxito que ha tenido el primer curso que se ha impartido en el poblado con una profesora.

Los niños/as, madres y padres disfrutaron de un encuentro precioso que nos dejó muchas reflexiones como estas: “Los niños hablan más desde que hay una maestra, antes casi no hablaban aunque les preguntásemos”, “Siempre cuentan muchas cosas sobre la escuela, la comida y la familia, están aprendiendo mucho”.

Estamos encantados/as de poder formar parte de la vida de los niños y niñas de Arkiso Akako. Los expertos cuentan que el número de palabras que se aprende y se usa en los primeros años de vida es clave para el desarrollo humano.